viernes, 23 de noviembre de 2012

Cambios y otras atrocidades.

Intentando buscar una luz en el túnel, un 'fondo de escape.' Pero solo veo la lluvia y una niebla que me ciega. Ciega por esta puta niebla, o por el maldito amor.


Las verdades no existen, tus verdades tampoco... 

Pero ya no importa, tú me has enseñado a soportarlo. Caídas a un vació donde el desquicio te puede, donde no mandas tú, donde  tus instintos son los que lo manejan. Es todo tan difícil de entender, que resulta excitante. Me dominan las humedades de las que tanto hablas, de la dureza de tus palabras y de lo 'bonito' que queda tu boca pegada a la mía.-Vamos!... Fundamos la plata de nuestras alianzas junto con nuestros cuerpos y disfrutemos del placer caliente y derretido que puede llegar a ser,-si surge.- 

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''Vamos, nena'' Y otras pocas atrocidades desvariadas con las que juegas a tu favor. Despeinada y con el 'rímel' arrastrado por mis mejillas, sudada y con tu olor y tus manos todavía marcadas en mi cuerpo, descanso. Como si no hubiera mañana, cierro los ojos y puedo sentir tus sesenta y pico encima de mi. O no sé. (Me apetece fumar-pienso-) Pero hace un frío que te cagas y desnuda metida en tu cama me parece bastante cómodo, así que elijo volver a fumarte y exhalar tu nicotina prohibida de la que solamente se consigue cuando tú quieres...  Ahora ya comprendes lo ajustado de mis vaqueros. Las sonrisas por todo, los mensajes, las sorpresas.Pero, espera. Sí. No era niebla lo que me cegaba, sino humedad que pasea por la habitación, por el aire que separa las pocas partes de nuestros cuerpos que quedan separadas. Ojalá pudiera decir que todo es un engaño, que te he estado mintiendo que te amaba, cuando en verdad no y así poder vestirme y marcharme sin más. Pero en el frío sin tu sol, me congelaría. Me volvería loca sin tu calma. 

''Sola voy a mil por hora y me haces ir más despacio.''

Pero la segunda parte es que, a veces, me hace falta eso. Frenar y pensar mejor, no como cuando decidimos arañarnos tanto de buscarnos el alma. 

martes, 20 de noviembre de 2012

Prometo que si cambia, intentaré que sean las sábanas de la cama.

Sigues siendo mi hogar, mi lugar favorito. Mi 'hombro' protector de miradas furtivas y preguntas incómodas. El paisaje que me calma; la caricia que me eriza, las lluvias llenas de relámpagos, la voz en el medio del silencio...
Hoy estoy aquí, (como siempre). Pero, sé que mañana cambiará. El lugar, el calor de tu hombro, las imágenes, las gotas, incluso tus relámpagos... Entonces me pregunto si seguirá siendo mi hogar...

¿¡Hogar!? No sabría describirlo. 

Aunque para mi siempre será donde quede todavía algo de lo que me enamoré. En aquella calle.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Ella se pinta los labios para tapar el corazón. Y no sabe que se le acabará antes. Si la barra de carmín o su propio corazón...

Se que correr detrás tuya no es buena idea. ya que llevo puestos unos Catorce. Ya nada tiene lógica. Y mientras intento que mi mente no piense en ti, miro como las nubes se mueven, y me pregunto si tú estarás debajo de alguna. ''Joder'' Aun que creo que eso a ti no te importa. Ni eso ni yo. Te habrás dado cuenta que las cosas cambian conforme evolucionas y entonces comprenderás que el único culpable de todo los cambios aquí y en esto, eres tú. Es tan fácil hablar estando asquerosamente lejos de todo eso... Que todavía recuerdo tus manos ásperas recorriendo las curvas de mis caderas, que un día fueron marcadas por ti. 

Hasta que alguien nos diga lo contrario.

Sostén la cabeza alta, pensé. Nada ni nada va hacer que te hundas.

Comprobé que los que; más que sacrificios, eran deliciosos placeres, tenían que dejar de salir de mi. Sintiéndote a cada paso y tu cuerpo ocupando mi cabeza todo el día. Para luego recibir un, ''¿Vas a querer fumar? ''

...

martes, 6 de noviembre de 2012

Sentimientos edredonados.

Voy a tener que buscarme otro punto de inspiración que esté más cerca de mi cuando lo necesite. 

Esto de tener que salir a buscarte no me reconforta. Esta lloviendo, si. Pero es inútil mojarme por una cosa que ya no es mía, que ya no tiene sentido. Ahora la historia cambia. 

Ahora ya ha empezado a llover y no me apetece ponerme las botas y la capucha para ir a buscarte. Me mojaré sola, mirando como te diviertes en tus habituales pecados.

''Sola. Sí''

Pero recuerda que mi arte, ya no dependerá de ti, ya no te necesitaré locamente.